Eliminamos los mayores desperdicios.
Cada año se desperdician unos 1.200 millones de toneladas de alimentos en el mundo. Eso es medio kilo al día por persona en el planeta. Los residuos alimentarios representan la tercera fuente de emisiones de CO2 del mundo.
La mejor forma de llegar a la raíz del problema es encontrar los puntos débiles de la cadena de suministro.
Nuestros expertos evaluarán su cadena de suministro para identificar esos puntos problemáticos. Analizaremos de forma sistemática sus procesos de embalaje para transporte y gestión de materiales para descubrir dónde se producen los desperdicios. También analizaremos sus procesos logísticos, el impacto medioambiental y el transporte. Tras esto, nuestro equipo podrá llevar a cabo una evaluación exhaustiva.